Los Springboks ganaron y sueñan con el título
Se acabó el sueño de Nueva Zelanda de retener la corona del Tri Nations.
Los Springboks derrotaron a los de negro por 40-26 con una producción de cinco tries contra dos, y sumando punto bonus. Los Springboks dejaron el campo de juego con 5 puntos, los All Blacks con ninguno.
Ahora el título se decidirá en Durban donde los Springboks enfrentarán a los Wallabies.
Para los vencedores en Johannesburg fue la nueva "Freedom Cup" (Copa Libertad), cuando Sudáfrica celebra 10 años de libertad democrática desde la primer elección democrática en 1994.
Fue un partido que los Springboks merecieron ganar largamente, habiendo incluso dejado de anotar 20 puntos.
Antes del partido, Nelson Mandela apareció en el campo de juego y ambos equipos se presentaron ante él. Joel Stransky, el ex-apertura Springbok, se refirió a Mandela como el Santo Patrón del Rugby Sudafricano.
Presumiblemente su "santidad" fue un poderoso antídoto contra el haka, esta vez liderado por Kees Meeuws en lugar de Carlos Spencer.
Los Springboks dominaron el partido desde el comienzo del mismo y bien podrían haberlo perdido debido a las fallas (erraron tres envíos a los palos, dos conversiones y una oportunidad de try cuando eran tres contra uno, a cinco metros del ingoal rival).
A diferencia del primer partido entre ambos jugado en Christchurch, esta vez los Springboks dominaron tanto posesión como territorio.
La hazana del partido fueron los tries de Marius Joubert, el primer Springbok en anotar un "hat-trick" contra Nueva Zelanda desde que lo hiciera por última vez Ray Mordt en 1981.
Los All Blacks con Andrew Mehrtens como apertura arremetieron cuanto pudieron, pero no fue suficiente para quebrar la dura defensa sudafricana.
Se acabó el sueño de Nueva Zelanda de retener la corona del Tri Nations.
Los Springboks derrotaron a los de negro por 40-26 con una producción de cinco tries contra dos, y sumando punto bonus. Los Springboks dejaron el campo de juego con 5 puntos, los All Blacks con ninguno.
Ahora el título se decidirá en Durban donde los Springboks enfrentarán a los Wallabies.
Para los vencedores en Johannesburg fue la nueva "Freedom Cup" (Copa Libertad), cuando Sudáfrica celebra 10 años de libertad democrática desde la primer elección democrática en 1994.
Fue un partido que los Springboks merecieron ganar largamente, habiendo incluso dejado de anotar 20 puntos.
Antes del partido, Nelson Mandela apareció en el campo de juego y ambos equipos se presentaron ante él. Joel Stransky, el ex-apertura Springbok, se refirió a Mandela como el Santo Patrón del Rugby Sudafricano.
Presumiblemente su "santidad" fue un poderoso antídoto contra el haka, esta vez liderado por Kees Meeuws en lugar de Carlos Spencer.
Los Springboks dominaron el partido desde el comienzo del mismo y bien podrían haberlo perdido debido a las fallas (erraron tres envíos a los palos, dos conversiones y una oportunidad de try cuando eran tres contra uno, a cinco metros del ingoal rival).
A diferencia del primer partido entre ambos jugado en Christchurch, esta vez los Springboks dominaron tanto posesión como territorio.
La hazana del partido fueron los tries de Marius Joubert, el primer Springbok en anotar un "hat-trick" contra Nueva Zelanda desde que lo hiciera por última vez Ray Mordt en 1981.
Los All Blacks con Andrew Mehrtens como apertura arremetieron cuanto pudieron, pero no fue suficiente para quebrar la dura defensa sudafricana.
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